De la Redacción
El empresario Ricardo Salinas Pliego, dueño de Grupo Salinas, extendió una invitación a la presidenta Claudia Sheinbaum para establecer una “mesa de negociación seria y transparente” entre sus respectivos equipos, con el fin de resolver las controversias fiscales que enfrenta su conglomerado.
A través de redes sociales, Salinas propuso un diálogo constructivo para determinar el pago de impuestos “justo y conforme a la ley”, enfatizando que las disputas públicas no benefician a México ni fomentan la confianza de los inversionistas.
Salinas respondió así a las recientes declaraciones de Sheinbaum en su conferencia matutina del 25 de septiembre, donde la mandataria cuestionó al empresario sobre supuestos beneficios obtenidos en el Fobaproa, la adquisición de ADN40 y acciones de Mexicana de Aviación, además de insinuar una posible defraudación fiscal. El empresario replicó con ironía, acusando a la presidenta de carecer de información precisa en otros temas, pero mostrar un interés particular en atacarlo. “Entiendo que me tiene miedo, esto es una persecución política”, afirmó, criticando que las acusaciones de delitos como fraude internacional generan un ambiente de desconfianza.
El conflicto fiscal escaló con la admisión, por parte de Hugo Aguilar Ortiz, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), de un recurso de revisión presentado por Grupo Elektra contra una sentencia del Décimo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa. Dicha resolución ordena a la empresa pagar 2 mil millones de pesos al Servicio de Administración Tributaria (SAT) por omitir el Impuesto sobre la Renta en el ejercicio fiscal de 2013, relacionado con pérdidas no declaradas en la enajenación de acciones. El caso, que data de hace 13 años, será analizado por el Pleno de la Corte bajo la ponencia de Aguilar Ortiz.
Salinas insistió en que los ataques verbales desde el gobierno, tanto en la administración actual como en la de Andrés Manuel López Obrador, no resuelven las diferencias y solo debilitan la confianza de millones de mexicanos que buscan un país con reglas claras, inversión y empleo. Su propuesta de diálogo busca superar el enfrentamiento personal y enfocarse en soluciones que fortalezcan el desarrollo económico de México.