De la Redacción
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció que su país impondrá aranceles de represalia del 25% contra Estados Unidos, en respuesta a las medidas comerciales adoptadas por el presidente estadounidense Donald Trump.
Durante una conferencia de prensa, Trudeau advirtió sobre las graves repercusiones económicas que traerán estas decisiones para ambas naciones.
“Los aranceles de Trump no sólo afectan a los canadienses, sino también a los estadounidenses. Sus trabajos están en riesgo. Cerrarán fábricas. Subirán los precios y bienes vitales serán inasequibles”, declaró.
El mandatario canadiense señaló que esta decisión de la Casa Blanca viola el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), cuyo propósito es fortalecer la economía regional.
“Pero no tiene que ser así”, añadió, evocando la célebre frase de John F. Kennedy:
“La geografía nos hizo vecinos, la historia amigos y la economía socios”.
Canadá y México unen fuerzas contra los aranceles
Trudeau anunció que trabajará en conjunto con México para enfrentar la imposición de estos aranceles.
“Hace unos minutos hablé con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum. También es blanco de aranceles aduaneros hoy, y estamos comprometidos a trabajar juntos para enfrentar este tema”, informó el primer ministro.
Aranceles de represalia
El gobierno canadiense detalló que los aranceles afectarán aproximadamente 155 mil millones de dólares en bienes estadounidenses, incluyendo:
II Cerveza
II Vino
II Whiskey y bourbon
II Frutas y verduras
II Electrodomésticos
II Ropa
II Zapatos
Cooperación y seguridad fronteriza
Además de las tensiones comerciales, Trudeau abordó temas de seguridad fronteriza y la crisis del fentanilo, subrayando que su gobierno ha tomado medidas concretas para fortalecer el control migratorio. También reafirmó el compromiso de Canadá en la lucha contra el tráfico de drogas.
Finalmente, Trudeau hizo un llamado a la cooperación y advirtió que cualquier acción que genere división traerá consecuencias económicas para ambas naciones.
“Si el presidente Trump quiere una nueva era dorada para Estados Unidos, el mejor camino es trabajar con Canadá, no castigarnos”, concluyó.