De la Redacción
Córdoba.- Con pancartas y voces de indignación, familiares y simpatizantes de una menor de edad que habría sido víctima de abuso sexual se manifestaron frente a la Catedral de la Inmaculada Concepción.
Su principal demanda es clara: que el proceso judicial contra el sacerdote señalado se lleve a cabo con total transparencia y sin privilegios, garantizando así una verdadera justicia para la víctima.
El presunto responsable, el sacerdote Mario “N”, fue detenido el domingo 10 de agosto por la Policía Ministerial en el puerto de Veracruz.
Actualmente, se encuentra en prisión preventiva en el penal de La Toma, a la espera de que avance la investigación. La Fiscalía General del Estado ha confirmado que enfrenta cargos por el presunto delito de pederastia agravada.
La denuncia relata que los hechos habrían ocurrido hace un año en la parroquia La Transfiguración del Señor, en Tierra Blanca, un lugar donde la menor ayudaba como monaguillo.
La familia, al enterarse de la situación, decidió proceder legalmente en marzo de este año, buscando amparo en la justicia.
La manifestación fue un grito de auxilio
Los familiares expresaron su profunda preocupación por la posibilidad de que influencias externas puedan interferir en el caso, y por ello, solicitaron a las más altas autoridades de Veracruz, incluida la gobernadora, que intervengan para asegurar un juicio justo.
Diversas organizaciones dedicadas a la defensa de los derechos de la infancia han recordado que, lamentablemente, este tipo de casos que involucran a figuras religiosas suelen enfrentar intentos de encubrimiento.
Su llamado a la sociedad es a mantener la atención sobre este caso y a exigir a las autoridades que actúen con la firmeza necesaria para que la justicia prevalezca sobre cualquier poder.