De la Redacción
Río Blanco. - Esteban Lechuga Moncada tenía 50 años y llevaba más de 20 trabajando como talachero; tenia su vulcanizadora en la calle Justo Sierra, la cual abría todos los días de la semana, a excepción de los domingos, pero ayer hizo una excepción que le costó la vida.
Eran casi 11:30 de la mañana y Esteban se encontraba en casa, como de costumbre, cuando inesperadamente recibió una llamada en su teléfono celular.
Los avances en las investigaciones ministeriales señalan que el talachero atendió el llamado, en el cual le solicitaron un servicio: la reparación de un neumático qué supuestamente le llevaron a su lugar de trabajo.
Esteban se preparó rápidamente, tomó su bicicleta y se apresuró a llegar a su negocio, muy conocido por estar ubicado casi frente al entronque Vicente Guerrero.
No había pasado más de 25 minutos y Esteban llegaba a su vulcanizadora, dispuesto a un trabajo extra, pero todo aquello solo era una trampa.
Según las indagatorias, muy cerca del lugar lo esperaban dos sujetos en motocicleta, quienes lo emboscaron y le dispararon varias veces.
Los agresores escaparon hacia diferentes direcciones, mientras que Esteban quedó tendido en el suelo, la ayuda llegó rápido, pero los paramedicos solamente confirmaron que había muerto de manera instantánea.
Las autoridades ministeriales iniciaron la carpeta de investigación correspondiente y cuentan con varias declaraciones, sin embargo, los familiares no entienden el motivo de la agresión y hasta hoy, la Fiscalía General del Estado (FGE) no cuenta con una línea respeto al asesinato de Esteban Lechuga.