Nacido en el estado de Veracruz, el menor de edad fue diagnosticado con leucemia desde que tenía cinco años. En octubre del año pasado, la enfermedad se volvió más agresiva y después de más de 120 quimioterapias, José Armando le pidió a sus padres no seguir con el tratamiento y cumplir dos deseos: celebrar un cumpleaños con sus amigos y familia, y asistir a un juego del equipo de sus amores: Cruz Azul.
Debido a su estado de salud, el menor no pudo viajar a la Ciudad de México para conocer a los jugadores de Cruz Azul, pero se esperaba tuviera oportunidad más adelante. Ahora los observará desde otro punto.